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Santo Domingo, R.D.-
El Colegio Dominicano de Artistas Plásticos (CODAP) representado por Antonio Guadalupe y demás miembros de la junta directiva reconoció anoche los aportes de Don Juan José Bellapart por su importante y significativa labor para la vida cultural de nuestro país y la formación del primer museo de arte privado del país, con el que se ha conseguido divulgar y promover a nuestros artistas y proyectar su producción artística a nivel local e internacional.
El Museo Bellapart, a través de un intenso plan de exposiciones temporales, de exposiciones itinerantes a nivel internacional junto a un importante programa de actividades didácticas avala nuestro arte en la región latinoamericana y en el mundo. Su colección permanente corresponde a una selección de las tendencias y los nombres más significativos del panorama artístico dominicano desde finales del 1800 hasta mediados de este siglo.
Juan José Bellapart nació en Barcelona 1946, España. Tenía 16 años y casi nada de futuro. Los vecinos del piso contiguo planeaban irse a América. A Santo Domingo específicamente. Freddy García Doménech, contemporáneo, hijo del matrimonio vecino le entusiasma con la idea de viajar hacia la tierra de las oportunidades, de las esperanzas. Santo Domingo era el nombre del futuro y de la relativa certidumbre.
Juan José convence a sus padres. Estos aprueban su resolución con renuencia y cierto dejo de tristeza que anuncia las nostalgias por venir. Sale de España en el famoso buque “Marqués de Comillas”. Hacen escala en New York. Luego retoma el curso y sigue por avión a Miami y La Habana, para por fin llegar a su destino, Santo Domingo.
Siguiendo el patrón tradicional de los jóvenes inmigrantes españoles, de ajuste y acomodación al nuevo medio, consigue trabajo con su compatriota Don Félix que entonces tenía una tienda de géneros, que hoy con otros dueños, se ha convertido en la más grande tienda por departamentos de Santo Domingo.
Hoy, cincuenta y tantos años después de su llegada a la República Dominicana, Juan José Bellapart es un paradigma del amor y la dedicación al trabajo, del éxito, y al mismo tiempo del coleccionismo y mecenazgo más prestigioso en la República Dominicana y es reconocido por los propios artistas dominicanos.
Mirada al arte, felicita a Don Juan José por este merecido reconocimiento, quien por demás puede estar seguro que quedará como un inmortal de las artes dominicanas, ya que como promotor del arte ha hecho una labor excepcional, digna de los mejores elogios. Los dominicanos y sobre todo los capitaleños están orgullosos por este aporte y tienen razones más que justificadas para ello.
El Colegio Dominicano de Artistas Plásticos (CODAP) representado por Antonio Guadalupe y demás miembros de la junta directiva reconoció anoche los aportes de Don Juan José Bellapart por su importante y significativa labor para la vida cultural de nuestro país y la formación del primer museo de arte privado del país, con el que se ha conseguido divulgar y promover a nuestros artistas y proyectar su producción artística a nivel local e internacional.
El Museo Bellapart, a través de un intenso plan de exposiciones temporales, de exposiciones itinerantes a nivel internacional junto a un importante programa de actividades didácticas avala nuestro arte en la región latinoamericana y en el mundo. Su colección permanente corresponde a una selección de las tendencias y los nombres más significativos del panorama artístico dominicano desde finales del 1800 hasta mediados de este siglo.
Juan José Bellapart nació en Barcelona 1946, España. Tenía 16 años y casi nada de futuro. Los vecinos del piso contiguo planeaban irse a América. A Santo Domingo específicamente. Freddy García Doménech, contemporáneo, hijo del matrimonio vecino le entusiasma con la idea de viajar hacia la tierra de las oportunidades, de las esperanzas. Santo Domingo era el nombre del futuro y de la relativa certidumbre.
Juan José convence a sus padres. Estos aprueban su resolución con renuencia y cierto dejo de tristeza que anuncia las nostalgias por venir. Sale de España en el famoso buque “Marqués de Comillas”. Hacen escala en New York. Luego retoma el curso y sigue por avión a Miami y La Habana, para por fin llegar a su destino, Santo Domingo.
Siguiendo el patrón tradicional de los jóvenes inmigrantes españoles, de ajuste y acomodación al nuevo medio, consigue trabajo con su compatriota Don Félix que entonces tenía una tienda de géneros, que hoy con otros dueños, se ha convertido en la más grande tienda por departamentos de Santo Domingo.
Hoy, cincuenta y tantos años después de su llegada a la República Dominicana, Juan José Bellapart es un paradigma del amor y la dedicación al trabajo, del éxito, y al mismo tiempo del coleccionismo y mecenazgo más prestigioso en la República Dominicana y es reconocido por los propios artistas dominicanos.
Mirada al arte, felicita a Don Juan José por este merecido reconocimiento, quien por demás puede estar seguro que quedará como un inmortal de las artes dominicanas, ya que como promotor del arte ha hecho una labor excepcional, digna de los mejores elogios. Los dominicanos y sobre todo los capitaleños están orgullosos por este aporte y tienen razones más que justificadas para ello.
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